En el marco de la final entre Deportivo Patria Nueva y Molinito FC, un emocionante encuentro de fútbol que mantenía en vilo a los espectadores, el marcador a favor de Patria Nueva se vio empañado por un inesperado empate en los últimos minutos de compensación.
La reacción de los padres de familia fue de enojo, desencadenando reclamos e insultos dirigidos al árbitro central. Este descontento culminó en discusiones acaloradas entre los padres, generando un ambiente tenso en las gradas.
Salvador Campos, encargado de la liga, se pronunció sobre el lamentable suceso, indicando que, a pesar del empate, el partido fue otorgado a Patria Nueva. Sin embargo, Molinito FC decidió no continuar jugando, expresando preocupación por la seguridad de sus jugadores, niños y seguidores. Campos lamentó la situación y compartió su experiencia en el juego de ida, donde propuso a la liga de la PingüiSport lanzar una campaña contra la violencia infantil. El encargado hizo un llamado a los padres para que en lugar de generar disturbios, enfoquen su atención en el disfrute del juego de los niños, subrayando la importancia de evitar comportamientos que afecten la experiencia deportiva de los jóvenes participantes.
Este incidente dejó un sabor amargo para Campos, quien está comprometido en fomentar un ambiente positivo y seguro para los niños involucrados en el deporte. Ante la difícil tarea de controlar situaciones similares con la cantidad de personas presentes, expresó la necesidad de buscar apoyo para abordar y prevenir futuros episodios de violencia en eventos deportivos infantiles.
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